Si en nuestro último post hablábamos de los movimientos de un gigante como HP para lograr un hueco dentro de los servicios cloud, en nuestro artículo de hoy os hablaremos de cual es la posición de Intel respecto a la nube y qué movimientos está realizando.
En un mundo post-Wintel (abreviación de la alianza Windows/Intel que históricamente ha dominado la industria del PC), parece ser que Intel ha puesto su punto de mira en la nube y, más concretamente en los smartphones.
En este sentido, Intel ha tenido en cuenta que por primera vez, durante el último cuatrimestre de 2010, la venta de smartphones superó a la venta de PCs. Por lo tanto, el viejo paradigma de equipos cada vez más potentes ya no tiene sentido en el nuevo modelo de movilidad y servicios en la nube.
Aunque Intel sigue luchando para introducirse en el mercado de smartphones, parece ser que el crecimiento en la venta de este tipo de dispositivos también le ha beneficiado. La compañía americana estima que por cada 660 smartphones que se venden, es necesaria la instalación de un nuevo servidor. Del mismo modo, es necesario un nuevo servidor por cada 110 tablets vendidas.
Durante la celebración de una sesión sobre la visión de la tecnología Intel para cloud computing, el CTO de la compañía (Stephen Pawlowski) enumeró las tendencias cloud que ayudarán al crecimiento de la empresa.
Según IDC, la capacidad de almacenamiento necesaria para soportar toda la cantidad de información que se mueve en la nube se espera que crezca un 670% durante el periodo 2009-2014.
El aumento del tráfico relativo a video y tecnologías como GPS, acelerómetros, etc. demandan una enorme capacidad de procesamiento. No digamos el aumento en la demanda de servicios de análisis de grandes volúmenes de datos en la nube (Big Data analytics). Todos estos seguramente necesitarán de tecnología Intel.
Según Pawlowski, también aumentará la necesidad de interconexión entre los distintos tipos de dispositivos. En este sentido Intel está trabajando en un dispositivo tipo hub que permita la conexión de manera segura entre PCs, tablets y smartphones.
Por otro lado, Intel tiene la intención de tener un mayor impacto directo sobre cómo trabajaran los sistemas cloud en el futuro. Pawlowski comentó que la empresa está trabajando sobre la tecnología conocida como “processor affinity“: el desarrollo de algoritmos que se ejecutarán directamente sobre el chip que ayudarán a asignar la carga de trabajo al procesador adecuado. Esta tecnología permitiría al usuario “apagar” núcleos de procesador que no estuvieran activos para, de este modo ahorrar energía, un elemento clave en la nube. Otras tecnologías que podrían ayudar al ahorra de energía son el desarrollo de NVM (Non Volatile Memory) en las cuales Intel está trabajando.